Un mensaje actual que resuena en nuestros oídos desde 2010.
Un reportaje con datos contundentes y una Palabra esclarecedora.
Por Guillermo Prein
Cuando la bruma avanza, la realidad no se mueve, pero es imposible poderla ver.
Es imprescindible que la misericordia se encuentre con la verdad, porque cuando las tinieblas imperan, es probable que terminemos haciendo misericordia con el victimario en lugar de aplicarla a favor de la víctima.
En diciembre de 2014, alertamos al pueblo recordando el mensaje que, a fines de 2010, recibimos para este quinquenio 2011-2015, haciendo hincapié sobre la violencia que se desencadenaría a finales del mismo.
Días después, el último domingo del año, escuchamos un mensaje que mencionaba la extraña tranquilidad vivida en el mes de diciembre, días que suele ser tumultuosos económica y políticamente en nuestra Argentina. Fuimos alertados sobre la TENSA CALMA que se percibía y llamados a estar en una actitud de oración expectante, especialmente en enero y febrero.
Aquel domingo fue 28 de diciembre, “día de los Santos Inocentes”, en el cual se recuerda a los niños asesinados por Herodes, quien ordenó un genocidio intentando matar a Jesús, que recién había nacido. Un hecho que trae mayor luz a nuestros días.
Para que haya paz, ella tiene que besarse con la justicia, la cual acude cuando de la tierra brota la verdad.
Quien conoce y entiende a Dios sabe cuánto nos ama, por eso, demanda: misericordia, juicio y justicia.
Haciendo misericordia con quien sufre y llevando a juicio al victimario, alcanzaremos justicia.
Recordemos con atención lo que decíamos en marzo de 2010. (Ver video adjunto)
Las noticias y sensaciones vividas en estos primeros días del año hacen parecer que aquellas palabras se perdieron en el desierto, sin embargo, llega el tiempo en aquel mensaje retorna desde la soledad.
A la Justicia injusta, que durante más de veinte años respondió a infernales intereses esparciendo bruma y borrando las pruebas del horror, le llega su juicio.
A los personeros de la muerte, que se esconden tras las tinieblas y los secretos, los expone el sol de Justicia que entre nubes, viene amaneciendo…
Santos Inocentes, llegó nuestra hora. Debemos gritar desde el desierto en este primer trimestre de 2015, tal como nos dijo Su Palabra:
Voz que clama en el desierto: Preparad camino a Dios; enderezad calzada en la soledad a nuestro Dios. Todo valle sea alzado, y bájese todo monte y collado; y lo torcido se enderece, y lo áspero se allane. Y se manifestará la gloria de Dios, y toda carne juntamente la verá; porque la boca de Jehová ha hablado.
Voz que decía: Da voces. Y yo respondí: ¿Qué tengo que decir a voces?
Que toda carne es hierba, y toda su gloria como flor del campo. La hierba se seca, y la flor se marchita, porque el viento de Jehová sopló en ella; ciertamente como hierba es el pueblo.
Sécase la hierba, marchítase la flor; mas la palabra del Dios nuestro permanece para siempre. Súbete sobre un monte alto, anunciadora; levanta fuertemente tu voz, anunciadora de…; levántala, no temas; di a las ciudades…: ¡Ved aquí al Dios vuestro! He aquí que el Señor vendrá con poder, y su brazo señoreará; he aquí que su recompensa viene con Él, y su paga delante de su rostro. Como pastor apacentará su rebaño; en su brazo llevará los corderos, y en su seno los llevará; pastoreará suavemente a las recién paridas.”
Isaías 40.3-11 (RV1960)
Todo está en la Biblia, es tiempo de meditar:
La misericordia y la verdad se encontraron;
La justicia y la paz se besaron.
La verdad brotará de la tierra,
Y la justicia mirará desde los cielos.
Salmo 85.10-11 (RV1960)
Así dijo Dios: No se alabe el sabio en su sabiduría, ni en su valentía se alabe el valiente, ni el rico se alabe en sus riquezas. Mas alábese en esto el que se hubiere de alabar: en entenderme y conocerme, que yo soy Dios, que hago misericordia, juicio y justicia en la tierra; porque estas cosas quiero, dice Dios.
Jeremías 9.23-24 (RV1960)