“El lunes me llevan a un hogar, mi novio no quiere y yo tampoco”, nos dijo Cata, sentada sobre su cama. Cumplía 16 y su preocupación mutó en alegría cuando pudo disfrutar el festejo improvisado en la Sala 29 del hospital Muñiz.
El sábado 8 de agosto, la Asociación Civil Artenenes, la organización RockandVida e integrantes del Centro Cristiano Nueva Vida de Parque Patricios, llegaron a la sala 29 y la sala 32 de pediatría del hospital Muñiz. No era el día del niño, pero era una buena oportunidad para festejar, y sin saberlo el festejo incluyó el cumpleaños número 16 de Catalina Belice
El Hospital de enfermedades Infecciosas “Dr. Francisco Javier Muñiz está en la calle Uspallata al 2200 de Parque Patricios desde 1886. Ya en 1882, era casillas de madera llamado “casa de aislamiento” ante la necesidad de atender enfermedades infecciosas.
En más de cien años, el Muñiz ha enfrentado todas las epidemias que afectaron a la Argentina a lo largo de la historia. Dentro de esa macro historia hay millones y millones de vidas y el sábado 8 de agosto se procuró capturar un momento feliz para algunas, y se logró
En un abrir y cerrar de ojos, la mesa acostumbrada a gasas, medicamentos, se llenó de repostería con insólitas caritas y colores. Paquetes, regalos, y monederos con infinidad de esmaltes y maquillajes, empezaron a revolotear como mariposas por los rostros y uñas de las chicas. Mucho moño, cintas y olor a sorpresa.
Catalina, la cumpleañera, arreglaba su flequillo alborotado con uñas perfectas y recién pintadas, mientras se reía con sus amigas, las viejas y las nuevas que hoy, había conocido.
En la sala 29 del Hospital, hay 5 adolescentes internadas. “Su problema no es de salud, es social” dice Lorena, enfermera de los fines de semana y feriados de esa sala. Otra vez el VIH y su “enfermedad social” para toda edad, pero más un poco más, para la adolescencia.
Sandra es voluntaria del Hospital Muñiz, también paciente, para ella nada de lo que ocurra allí adentro es ajeno. Su corazón y entusiasmo contagió a otros compañeros de milicia y diferentes organizaciones se dieron cita ese día, que no era el día del niño. Porque esperarlo para festejar?
Equipos de voluntarios de estas organizaciones van hace más de 20 años al Muñiz, para que todos dejen de sentir que están en la antigua “casa de aislamiento”. RockandVida, es una organización que trabaja con prevención y acompañamiento en VIH, y otras problemáticas sociales, Artenenes, es una asociación Civil, que nació como una productora teatral y hoy además de presentar espectáculos para niños, recorre los barrios con propuestas creativas para toda edad, y el Centro Cristiano Nueva Vida, comunidad de Fé, es el alma mater de estos desprendimientos y otros que hacen bien a la gente.
Representantes de todos ellos estuvieron en el Muñiz para armar una fiesta improvisada y dejar una señal de esperanza.
La aparente improvisación, no fue tal, muchos días y voluntades se unieron para cocinar, juntar dinero, armar juegos y actividades para hacer de esa tarde de sábado un momento arrebatador del milagro que transforma tristezas en alegrías.
A pesar de, y con todo eso.